Sepelio de Fujimori fue multitudinario y con sentidas palabras de sus hijos

Llegó a su última morada y recibió el último adiós en medio de una multitud. Cuando la carrosa con los restos del expresidente apareció en el cementerio Campo Fe de Huachipa por la avenida Las Cigüeñas, cientos de personas ya lo estaban esperando. Habían llegado a pie, en autos particulares y decenas de buses. Los restos del exmandatario fueron enterrados con la presencia de sus hijos Keiko, Sanchi y Kenji Fujimori, sus hermanos Santiago y Juana, así como la compañía de congresistas de Fuerza Popular y políticos que formaron parte de sus gobiernos. Su tumba está al lado de la de su esposa Susana Higuchi, como él lo pidió.

A SUS DETRACTORES

Al despedirse de su padre, Kenji Fujimori destacó los logros de su gobierno y señaló que legado durará décadas. “A mucha honra llevo el apellido Fujimori porque cambiaste el rumbo de este país para el bien de todos los peruanos. Tu legado, Pa’, Chino, como te dice la gente, va a durar décadas, décadas y décadas”, indicó. “Quiero decirles a los detractores de mi padre que el Chino puede partir a la otra vida, pero va a estar más presente que nunca en nuestros corazones. En cada colegio que ustedes vean, en la paz con el Ecuador, en la derrota a Sendero Luminoso y MRTA. En cada compra que ustedes hagan y vean la moneda del sol, ahí van a ver reflejado el rostro de mi padre porque él fue quien cambió la economía de todos los peruanos”, expresó entre lágrimas.

“NOS ENSEÑÓ A AMAR”

En tanto su hermana Keiko señaló que, a pesar de la persecución que sufrió durante años, en el corazón de su padre nunca hubo rencor. “Nos enseñó a querer, a amar, a perdonar, y ese es el mensaje que él quiere dar a todos los peruanos. Hoy, con el cuerpo acá, de mi padre, tenemos que dejar de lado esos odios irracionales y empezar a buscar la paz, la reconciliación. Podremos tener muchas diferencias, pero como siempre nos enseñó mi padre, el Perú está primero, y a eso debemos abocarnos”, expresó.

“EL PERÚ ES UN MEJOR PAÍS”

“Hoy, frente a nuestro padre, nos comprometemos a construir un mejor futuro, con paz, con tolerancia, con armonía. Papito, hoy el Perú es un mejor país, gracias a ti, a tu esfuerzo, a tu sacrificio, a tus enseñanzas”, puntualizó. Al camposanto llegaron miles de manifestantes, a quienes poco les importó esperar varias horas bajo el sol para despedir al expresidente. Muchos provenían del interior del país, de lugares alejados de Ayacucho, Puno, Arequipa y Junín.

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