Jackson Mora niega infidelidad a Tilsa Lozano y enfrenta acusaciones: «Ella sabe todos mis pasos, es mi esposa»
En pleno escándalo mediático, Jackson Mora, el empresario y esposo de la modelo Tilsa Lozano, salió al frente para

En pleno escándalo mediático, Jackson Mora, el empresario y esposo de la modelo Tilsa Lozano, salió al frente para desmentir las acusaciones de infidelidad que han estallado tras su viaje a Bogotá, Colombia.
La controvertida situación se desató cuando el encargado del hotel donde se hospedó la delegación peruana de lucha, Andrés Rodríguez Hoyos, lanzó fuertes declaraciones sobre la supuesta traición de Mora hacia su esposa.
Rodríguez Hoyos aseguró que durante su estancia en el hotel, Mora se habría encontrado con otra mujer en una suite llena de condones y «residuos de lo que ocurrió». Estos explosivos comentarios hicieron eco en todos los medios y redes sociales, poniendo a la pareja en la mira de la crítica pública. ¿Qué habrá dicho Tilsa al enterarse de estos rumores?
Sin embargo, Jackson no se quedó callado y decidió responder con firmeza. En declaraciones recientes, dejó en claro que su esposa, Tilsa, está completamente al tanto de cada uno de sus movimientos:
«Ella sabe todos mis pasos, es mi esposa», reafirmó. Con esta contundente frase, Mora busca desviar las sombras que lo acusan de infidelidad y calmar a sus seguidores, quienes siguen de cerca la situación.
El empresario no dudó en disparar contra el encargado del hotel, tildándolo de irresponsable por hacer tales afirmaciones, asegurando que lo que está en juego es su matrimonio y su imagen.
«No voy a permitir que alguien ponga en duda la confianza que tenemos», remarcó Mora, al mismo tiempo que defendía el vínculo que comparte con Lozano, una de las figuras más queridas de la farándula peruana.
Las declaraciones de Rodríguez Hoyos no solo causaron revuelo, sino que también han despertado la compasión de muchos hacia Tilsa Lozano.
«Me da pena por Tilsa, pero aquí en Colombia le pusieron los cachos», expresó el empresario, avivando aún más la controversia. Una situación nada fácil para la exvengadora, quien debe lidiar con la presión mediática y el escrutinio público.